Cementerio de animales – Stephen King
La verdad es que para haber sido publicado en 1983 (yo ni siquiera había nacido por ese entonces), y para haber cambiado las cosas tanto desde entonces, es muy buen libro, un libro que podría ponerle a cualquiera los pelos de punta.
Terror, como no podía ser de otra forma tratándose de Stephen King. Cuando yo decidí elegir este libro, no tenía ni idea de que se había hecho una película sobre el, así que no me queda más que entretenerme e intentar buscarla, ¿se diferenciará mucho del libro?
Bueno, como suelo hacer, os presentaré a los personajes y después seguiré con la historia. ¿Me acompañáis?
Terror, como no podía ser de otra forma tratándose de Stephen King. Cuando yo decidí elegir este libro, no tenía ni idea de que se había hecho una película sobre el, así que no me queda más que entretenerme e intentar buscarla, ¿se diferenciará mucho del libro?
Bueno, como suelo hacer, os presentaré a los personajes y después seguiré con la historia. ¿Me acompañáis?
Personajes.
Louis Creed: El nuevo médico de la Universidad de Maine. Se llevó con él a toda su familia, creía que nunca se arrepentiría de su elección, pero no sabía lo que le aguardaba en Maine.
Rachel Creed: La esposa de Louis, ama de casa y con un severo trauma con la muerte.
Ellie Creed: La hija mayor de los Creed, aunque de mayor tenga poco, pues es una niña que va a su segundo año de parbulario, es decir, que tiene 5 años.
Gage Creed: El hermano pequeño de Ellie, de 2 añitos de edad, pero un niño lleno de energía y vitalidad.
Jud Crandall: El nuevo vecino de los Creed, un hombre de 83 años de edad aunque aparente muchísimos menos. Vive en la casa de enfrente con su mujer Norma Crandall.
Hay otros personajes con cierta influencia, como los compañeros de trabajo de Louis o la esposa de Jud, pero su relevancia es mínima, así que los voy a omitir.
Historia
La historia comienza con la mudanza de la familia Creed. El padre,
Louis, ha encontrado trabajo como médico en la universidad de Maine y decide
llevarse a su familia con él, desde Chicago a Maine, para iniciar una nueva
vida. Es al llegar a la nueva casa cuando conocen a Jud, un hombre de 83 años
muy bien llevados que vive al cruzar la carretera, vamos, que es su vecino de
enfrente.
Las casas de ambos están separadas por la carretera 15, y digo
carretera porque no es una calle como las que nos encontramos ahora en mitad de
las ciudades o los pueblos, es una carretera por la que pasan infinidad de
camiones a altas velocidades, lo que ha costado la vida de muchos de los
animales de aquellos que en esa carretera han vivido.
Bueno, pues resulta que dentro de la propiedad de Louis hay una
especie de sendero muy bien cuidado, un sendero del que los niños se encargan y
que lleva a Pet Sematary, es decir, el cementerio de mascotas, donde hay
enterradas mascotas desde vete tú a saber cuándo. Una de esas mascotas, por ejemplo,
es un perro que Jud tuvo siendo un crío.
Cuando Jud les lleva a ver el cementerio, Ellie coge un gran
berrinche pues empieza a darse cuenta de que Church, su gato, podría morir y
ella no quiere que muera. Y no solo Ellie coge el berrinche, también Rachel,
quien odia todo lo relacionado con la muerte y ni siquiera quiere hablar de
ella o pensar en ella, pues tiene un trauma por algo que le pasó a su hermana Zelda,
pero nunca habla de ello.
Bueno, pues la verdad es que todo comienza a torcerse el primer
día de universidad. A la enfermería llega un chico, Victor Pascow, al que han
atropellado, tiene un gran agujero en la cabeza y está muy malherido. Muere
allí mismo, pero no sin antes advertir a Louis sobre Pet Sematary, diciéndole que
no es un cementerio de verdad. También le dice una frase que se le queda
grabada “el fondo del corazón humano es aún más árido, Louis. El hombre siembra
solo aquello que puede. Y lo cuida” Finalmente le dice que se aparte de ellos.
Esa misma noche el fantasma de Victor Pascow fue a hacerle una
visita. Le llevó a Pet Sematary y le advirtió sobre la muralla de troncos, una
barrera que no debía traspasar por mucho que lo deseara. Textualmente le dijo: "aquí hay una fuerza superior a lo que usted
imagina. Es una fuerza vieja y siempre inquieta". La verdad es que Louis no
entendía nada y para él era más fácil pensar que todo había sido un sueño fruto
de su imaginación. Nada de lo que había pasado era real.
Fue el día de acción de gracias cuando traspasó la barrera por
primera vez. Rachel se había ido a pasar el día de acción de gracias con sus
padres, y se había llevado con ella a Ellie y a Gage, Louis por el contrario se
había quedado allí. Él y el padre de Rachel se llevaban fatal, no podían ni
verse desde que Irwin se había ofrecido a pagarle la carrera si dejaba a Rachel
y Louis lo había mandado a tomar por… de una forma muy poco educada.
Tras almorzar con Jud y con Norma, su esposa, se fue a casa a dormir
un rato la borrachera. Le despertó el sonido del teléfono, Jud había encontrado
un gato atropellado y creía que era Church, y sí, era Church, aunque era
extraño, pues desde que le habían castrado apenas salía de casa. La idea de
Louis era enterrarlo en Pet Sematary, pero Jud tuvo otra idea.
Traspasando los troncos y siguiendo un cierto tramo en el que
incluso había arenas movedizas se llegaba a un cementerio indio en el que los
micmacs enterraban a sus muertos hace mucho, mucho tiempo. Durante el camino
eran muchas las cosas que podían encontrarse, pero ese día tuvieron suerte,
solo unos ruidos les interceptaron por el camino. Llegaron al cementerio,
enterraron a Church e hicieron un “cairn” con las piedras que habían sacado al
cavar la tumba. Fue entonces cuando Jud le habló del cementerio indio y de
algunas de las historias que se contaban de él, como por ejemplo la historia de
que aquellas tierras habían sido corrompidas por un wendigo.
Fue al día siguiente cuando Louis entendió lo que implicaba enterrar
al gato en aquellas tierras, y lo hizo cuando Church apareció ronroneando por
la casa. Aunque el camión que le había atropellado le había partido el cuello y
Louis le había enterrado, Church estaba allí. En sus bigotes había restos de la
bolsa de basura verde en la que le había enterrado y también restos de tierra
en su pelaje, además, olía a muerte. Church había resucitado y estaba un pelín
raro.
A Louis se le pusieron los pelos de punta y fue a buscar a Jud,
quien le explicó que él había llevado allí a su perro, que también había
resucitado. También estaba raro y olía raro, pero no era peligroso, simplemente
diferente. Le dijo que alguna gente había enterrado allí a otros animales, y
solo Hanrrati, un toro, se había vuelto peligroso. Nunca habían enterrado a una
persona allí. Pero resulta que eso no era cierto.
Al volver del viaje nadie se dio cuenta de lo que le había pasado
a Church, pero todos lo notaron raro, incluso Ellie, que dormía con él en su
cama, se negó a que durmiera con él por el mal olor que despedía. Todo siguió
su camino hasta que Norma murió. Jud pasó ese mal trago lo mejor que pudo, y
siempre en compañía de Louis y su familia, aunque Rachel se negó a ir al
entierro.
Pero Norma no fue la
única que murió, también Gage, que se lanzó corriendo hacia la carretera huyendo de Louis, quien al principio le perseguía jugando, pero luego lo hacía en serio. Louis no pudo evitar que un camión que pasaba a toda velocidad se llevara por delante a su hijo, matándole en el acto.
Desde incluso antes
del entierro por la cabeza de Louis ya se había pasado una idea, enterrar a
Gage en el cementerio micmac. Si Church había vuelto, también podía volver
Gage. Jud pareció intuir lo que pensaba y le instó a no hacerlo. Le contó que
si que habían enterrado a otro chico allí, un chico que había muerto en la
guerra. Ese chico se había vuelto malvado, diciendo a todo aquel que se
acercaba a él aquello que escondía y que no quería que nadie supiera, parecía
saber todo lo malo de cada una de las personas y estaba dispuesto a utilizarlo
contra ellos. Finalmente su padre se había vuelto loco, le había vuelto a
matar, se había suicidado y le había prendido fuego a la casa.
Pero esto no fue
suficiente para desalentar a Louis, sabía que era mala idea, pero algo le
instaba a hacerlo. Trataba de tranquilizarse a sí mismo diciéndose que todo
saldría bien, que Gage volvería y todo estaría como siempre. Así, tras el
entierro, envió a Rachel y a Ellie a Chicago con los padres de ella, él iría
después con Gage cuando hubiera resucitado si todo salía bien. Pero nada salió
bien.
Gage volvió, pero ya
no era el niño adorable de 2 años que había sido, buscaba venganza, venganza
hacia Jud, al que consideraba uno de los responsables de la muerte de ese otro
chico que al que su padre había resucitado tiempo atrás. Y lo consiguió, obtuvo
su venganza, Jud murió bajo las manitas de Gage que empuñaban un bisturí que
había sustraído del maletín de su padre. Mientras, Louis dormía como un bendito
y Rachel se jugaba la vida volviendo a toda velocidad y en plena noche desde
Chicago.
Ellie llevaba tiempo
con extraños sueños en los que veía a Church, a su padre y a Gage morir, y fue
ella la que alertó a Rachel, pues había soñado con un chico que le había dicho
que ya era tarde, que él ya no podía hacer nada. Ese chico era Victor Pascow, y
no había podido evitar que Louis atravesara la muralla que suponían los
troncos.
Rachel fue directamente a casa de Jud, le había dicho que vigilara su casa por si
regresaba Louis, pero Jud se había quedado dormido y no había visto volver a
Louis, y mucho menos había evitado que hiciera aquello que él sabía que
pretendía hacer. No llegó a ver a Jud pues oyó un ruido en el piso superior y
subió. Allí la esperaba Gage, que corrió hacia ella con el bisturí escondido a
su espalda. Su final fue el mismo que el de Jud.
Louis había notado
que alguien o algo entraba en la habitación mientras dormía, pero pasó
olímpicamente. Al despertar bajó a la cocina y al mirar por la ventana vio que
Jud tenía visita, era un coche que no conocía, y sobre la carrocería dormía
Church. No fue hasta que Irwin (el padre de Rachel) le llamó que supo que la
visita de Jud era Rachel.
Mientras hablaba con
Irwin descubrió unas huellas de barro en el suelo, unas huellas pequeñas, las
huella de Gage. Siguió las huellas y llegó hasta su cuarto, hasta su maletín de
herramientas, que estaba tirado en el suelo. Faltaba un bisturí, y todo
empezaba a cuadrar, Gage había vuelto y había robado el bisturí. Ahora estaría
en casa de Jud, y haciendo vete a saber qué. Era peligroso, igual que lo había
sido el chico muerto en la guerra al que su padre había resucitado.
Ya había pensado en
que haría si ocurría eso, morfina, esa era la respuesta. Primero fue Church,
una sola inyección con una dosis tan elevada que podría tumbar a un elefante,
la muerte le sobrevino en pocos minutos. Después fue Gage, aunque él sí que
opuso cierta resistencia, tanta que tuvo que emplear varias agujas, pues las
primeras acabaron saliendo despedidas sin ni siquiera poder clavárselas. Se
había vuelto loco, igual que el padre del otro chico resucitado, y el resultado
fue el mismo, acabó por prenderle fuego a la casa, con los cadáveres de Jud y
Gage dentro, pero no el de Rachel.
Aquellas tierras
seguían ejerciendo poder sobre él, aunque quizás no fueran las tierras, quizá
fuera aquel ser que había salido a su encuentro mientras llevaba el cuerpo de
Gage al cementerio micmac, quizá fuera el wendigo el que le movía a actuar así.
No lo sabía, pero tras vivir una primera pesadilla con Gage, volvió con el
cuerpo de Rachel a aquel lugar. Qué ocurrió con Rachel nunca lo sabremos, pues
es aquí donde termina esta historia de terror.
Bueno, pues espero que os guste, y como siempre os digo, nos vemos en el siguiente post!!
Excelente publicación.
ResponderEliminarRespecto al final que paso con Rachel? Si se toma el contexto del sueño de Elli, podríamos concluir que mató a Lou, pues Elli dice los vi muertos en mi sueño, cabe recalcar que todo lo que soñaba Ellie se hacia realidad.
Saludos, cementerio de mascotas es una obra excelente