12 jul 2017

El Temor de un Hombre Sabio

El Temor de un Hombre Sabio – Patrick Rothfuss



Vuelvo con otra de las entradas correspondientes al Anualthon 2017. Aunque este libro podía haberse ubicado dentro de unas cuantas premisas, he decidido que sea la número 29, un libro con canciones, pues al menos a mi me cuesta bastante encontrar libros así.

Esta es la segunda parte de la bien conocida historia creada por Patrick Rothfuss con Kvothe como protagonista. La primera ya empezaba contándonos parte de la vida de este chico, pues en esta la línea es la misma, Kvothe nos va contando la historia real de su vida, pero aunque guarda ciertos paralelismos, pues es la continuación del libro anterior, no se hace para nada repetitiva ni vuelve a centrarse en las mismas historias.

Se podría decir que es un libro igual, pero muy diferente al anterior, y que igual que su predecesor te deja pegado por horas a la silla. Muchísima gente me había dicho que tiene unas ganas terribles de que Rothfuss publique ya la tercera y última parte de esta trilogía, antes no les entendía. Ahora no solo les entiendo, también comparto esas ganas de tener esa tercera parte en mis manos.


Siempre os presento a los personajes y luego paso a comentar un poco la historia, la verdad es que en este salen casi los mismos personajes que en el anterior, así que simplemente voy a dejaros el enlace de la primera parte (El nombre del vientopor si queréis leer quienes y como son los protagonista. 

Hay nuevos personajes en la historia, como son Alveron y su esposa, la señora Lackless, pero no merece la pena entretenerse en ellos. También aparece Tempi, que es bastante importante, pero ya os hablo más abajo de él.




Historia

En esta nueva entrega, y como ocurría en el anterior libro Kvothe nos sigue contando la historia de su vida, y como siempre, los problemas y la suerte tienden a acompañarle en su viaje.

En este nuevo libro decide empezar a pasar de Ambrose, pero no por ello Ambrose va a pasar de él, así que para echarle de la universidad decide drogarle con algo que le hace no pensarse las cosas y actuar, volviéndole más bien irascible, con lo que va soltando de vez en cuando unas cuantas perlitas por ahí, incluso a Hemme, cuyas habitaciones habían sido incendiadas pocos días antes le dice que ojala hubiera estado en ellas mientras ardían.

Pero aunque se llevara mal con Hemme, y Hemme creyera que había sido él quien les había pegado fuego, no fue Kvothe, sino Elodin, a quien Hemme tampoco le caía nada bien... Vaya dos se habían juntado, uno con intenciones ocultas y el otro haciéndole caso...

La verdad es que para Kvothe todo se complica cuando su querida Denna decide empezar a verse con Ambrose, y Ambrose se queda un anillo de ella que Kvothe decide recuperar entrando en la habitación de Ambrose. ¿Qué ocurre? Pues que en los tejados Ambrose encuentra sangre de quien había intentado entrar en su habitación y empieza a hacerle felonía queriendo matarlo. Menos mal que Devi decide perdonarle y ayudarles, porque sino a saber como habría acabado la historia. ¿Sabéis como acaba? Con Devi, a petición de Kvothe, prendiéndole fuego al fetiche que Ambrose había hecho con la sangre de Kvothe y por ende incendiando toda su habitación. Total que al final Kvothe acaba dejando la universidad, pues todos le consideraban el culpable, y así no tendría que enfrentarse a una matricula impagable para él.

Así que gracias a Threpe acabó tomando rumbo a Severen para ponerse bajo el mando del maer Alveron, el gran señor de aquellas tierras. Total que en Severen logró salvarle a vida a Alveron, a quien su médico personal estaba envenenando, logró que la amada de Alveron se enamorara de Alveron, y logró acabar con aquellos que asaltaban y mataban a los recaudadores de Alveron.

Esta parte es importante por varias cosas, la primera, porque vuelve a encontrarse con uno de los que acabo con la vida de sus padres y su troupe, Ceniza. La segunda porque conoce a Tempi, un mercenario Adem que decide enseñarle cosas de su cultura, entre ellas a pelear, pero claro, eso no está permitido y Kvothe decide ir con Tempi a Ademre donde acaba casi convirtiéndose en un guerrero Adem, pero abandona antes. La tercera porque conoce a Felurian, un ser fata objeto de canciones y conocida por hacer que todo hombre muera en sus brazos extenuado tras tener relaciones con ella, o por volverse loco al dejarlo ella ir. Kvothe consiguió que ella lo dejara ir, pero para ello tuvo que prometerle que volvería para enseñarle la canción inconclusa que le había compuesto cuando estuviera completa.

Mientras está con Felurian también tiene un encuentro con el Cthaet, un oráculo al que los seres fata tienen auténtico terror, y al que Bast, como ser fata, no reaccionó demasiado bien. Que es el Cthaet y que es lo que ocurre con él tendréis que leerlo por vosotros mismos, pero merece muchísimo la pena.

Total que al final vuelve con Alveron y se decide a hablarle de los Amyr, y cual es su sorpresa al recibir, por parte del maer, una respuesta afirmativa, un "lo hablaremos en el futuro", pero para desgracia de Kvothe nunca llegaron a hablarlo. Kvothe se vio obligado a marcharse tras una pelea con Meluan, la esposa del maer, al descubrir ésta que él era un Edena Ruh.

Así que vuelve a la universidad, donde todos le reciben con una cierta alegría, mejor no hablo de la alegría que le dio a Hemme, que le daba por muerto y le cambio la cara al verlo. Elodín le recibió con una gran euforia cuando le contó que había conseguido llamar al viento un par de veces durante su viaje, y aunque no daba la asignatura de nominación ese bimestre, si que hizo de profesor particular con él.

A parte de toda esta historia tenemos lo que ocurre en el presente, y mira que el pobre Bast intenta hacer que Kvothe vuelva a ser el que era, pero nada, que no hay manera. Hay un cierto momento en el que dos soldados asaltan la posada, momento en el que Kvothe parece volver recordar quien era y se enfrenta a ellos, pero lo único que consigue es una buena paliza y sumirse en una depresión... Pobre Kvothe, pero pobre Bast a su vez, que tuvo que cargar con las heridas de Kvothe, pues se las transmitió a sí mismo.



Bueno, creo que es una idea muy general de que ocurre en el libro, pero que sirve como ejemplo, aunque queda muchísimo que me he dejado en el tintero, pero eso haría este post infumable. Así, me despido animándoos a tomar esta novela entre vuestras manos y a disfrutar de ella, que no os asusten las 1.200 páginas que tiene, merece mucho la pena. Como siempre os digo, espero que os guste y nos vemos en el siguiente post!! 


No hay comentarios:

Publicar un comentario