25 sept 2017

El Silencio de la Ciudad Blanca

El Silencio de la Ciudad Blanca - Eva Gª Sáenz de Urturi



La verdad es que llevaba bastante tiempo con ganas de tenerlo entre mis manos, y no me ha decepcionado ni muchísimo menos. Tantos buenos comentarios tendrían que tener su porque ¿no? y yo me sumo a ellos, a mi el libro me ha encantado.

Creo que ha sido su forma de escribir, su manera de narrarlo en primera persona, siempre con un toque de humor entre los pensamientos de nuestro protagonista, lo que ha hecho que este libro se sitúe en un buen puesto dentro de mis leídos. Y como no, por supuesto ha conseguido que esté en busca y captura de su segunda parte "Los ritos del Agua".

Bueno, pues esta también va a ser una de las premisas del Anualthon 2017, más concretamente la número 2, libro con un color en el título. Todos sabemos que el color es blanco y no blanca, pero aún así sigue siendo el mismo color, simplemente es una percepción de género. 

Quizás suene raro lo que voy a decir, pues por lo general los libros me decepcionan cuando se de antemano quien va a ser el asesino, pero en este caso me ocurrió algo totalmente diferente. La primera vez que apareció cierto personaje pensé "este personaje tiene algo raro", lo sabía, pero aún así Eva consiguió hacerme dudar y llevarme por el camino que quiso. Había otros indicios que me hacían pensar en relaciones que aún estaban por confirmar, y la verdad es que acerté con todo lo que en un principio pensaba, pero por una vez eso me hizo feliz en lugar de decepcionarme, pues había dado tantas vueltas que me parecía imposible que pudiera ser verdad.


Siempre os suelo presentar a los personajes y después voy a la historia, creo que voy a empezar a pasar de los personajes, total, si al final acabo hablándoos muchísimo de ellos. Además, acaba resultando cargante, así que...




Historia


Las primeras víctimas aparecieron el 24 de julio, en la víspera del día de Santiago, cuando toda Vitoria se preparaba para celebrar sus fiestas. Un chico y una chica, desnudos, con su mano en la mejilla del otro tratando de consolarle, con varios eguzkilores a su alrededor y en el interior de un edificio emblemático. Esa era la carta de presentación que el asesino había preparado al inspector Unai López de Ayala.

Una serie de ocho crímenes, cuatro chicos y cuatro chicas, cuatro parejas de las mismas edades (recién nacidos, 5 años, 10 años y 15 años), asesinados y dejados sus cuerpos en monumentos históricos, desnudos y con una mano en la mejilla del otro, como si tratara de consolarle. Eran los crímenes por los que Tasio Ortiz de Zárate había sido encarcelado hacía 20 años, condena por la que aún estaba en prisión, pero de la que pronto saldría con un permiso penitenciario.

El asesino había vuelto, los crímenes eran idénticos a excepción del veneno empleado, las nuevas víctimas continuaban la progresión de edades (20 años) y también tenían apellidos compuestos alaveses como Fernández de Betoño, el apellido de la chica de 20 años, igual que en los asesinatos de hacía 20 años. Solo dos días después aparecieron los cuerpos de la pareja de 25 años, chico y chica, apellido alavés compuesto, desnudos y consolando al otro con su mano en su mejilla.

Pero si aquella persona a la que se culpó de los crímenes está en la cárcel, ¿entonces quién es el culpable de estos asesinatos? ¿Un cómplice? ¿Un seguidor? ¿O es que Tasio está pagando por algo que no hizo y el asesino sigue aún en la calle?

Ese es el enigma que el inspector Unai López de Ayala, su compañera la inspectora Estíbaliz Ruíz de Gauna y la subcomisaria Alba Díaz de Salvatierra tendrán que desentrañar, peleando contra la prensa, intentando evitar más muertes y luchando incluso por su propia amistad y su propia vida.

Hay muchos matices que se podrían comentar sobre este libro. La relación de los gemelos Ortiz de Zárata, Tasio e Ignacio, por ejemplo. Tasio era arqueólogo e Ignacio policía, eran hijos de un magnate empresarial y estaban acostumbrados a hacer lo que les diera la gana sin sufrir consecuencias. Ignacio investigó los primeros 8 crímenes, encontrando ADN de Tasio en una de las víctimas y el veneno empleado en los asesinatos en casa de su hermano. Total, que Ignacio entregó a su hermano y ahora vive preguntándose que pasará cuando éste salga de prisión, pues no sabe si Tasio podrá o no perdonarle.

Después está la forma en la que Tasio se comunica con Kraken (mote que sus amigos pusieron a Unai cuando era adolescente y por el que aún le llaman). Por si no lo sabéis, que los presos tengan acceso a móviles y a Internet está prohibido dentro de las cárceles, pero Tasio tiene una cuenta de Twitter y no para de mandarle tuits a Kraken para ir guiándole. ¿Cómo es que Tasio tiene acceso a Internet?

También podría hablaros del inspector Unai López de Ayala, un hombre que en pocos días cumplirá los 40 años, un hombre con el corazón roto y destrozado. Su mujer murió unos años antes en un grave accidente de tráfico del que solo él salió vivo. Paula, su mujer, estaba embarazada de mellizos y él aún no ha conseguido superarlo. Por otro lado, hace 20 años, se obsesionó con los crímenes de Tasio, por lo que ahora solo busca saber la verdad y detener al asesino.

También podría hablaros de la subcomisaria Alba Díaz de Salvatierra. Ella perdió un hijo hace poco tiempo y está obsesionada con el running para perder así su figura de embarazada. Esta casada y su marido trabajaba en Vitoria, con lo que motivada por su marido decidió pedir el traslado a Vitoria, convirtiéndose en la superior de Unai y Estíbaliz.

Puedo hablaros de muchas cosas más, pero creo que lo voy a dejar por aquí, quién es el asesino y cuál es su motivación tendréis que averiguarlo vosotros por vuestros propios medios, pero hacedme caso, merece la pena averiguarlo. ¡No os decepcionará!



Bueno, pues me despido aquí, diciéndoos, como siempre, que nos vemos en el siguiente post. Un saludo y muchos besos!!

1 comentario:

  1. Es que no me acuerdo quién era el marido de Alba. Por qué Tasio en los señores del tiempo va donde Deba, quiere prueba ADN..? Si él estaba en los, Angeles al salir de la cárcel ? Y al marido lo mataron?

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